¡Hola lectores de tufisioinfantil! En el post de hoy os respondo a algunas de las preguntas que con más frecuencia me hacéis:Uso de tronas: ¿A qué edad se pueden utilizar?, ¿Tipos?, ¿Uso correcto?”.

Al igual que estuvimos viendo en el post Zapatos en bebés: ¿Son recomendables?”, el uso de tronas no depende de la edad del bebé sino del punto en el que se encuentre de su desarrollo motor.

La trona es un mueble que surge para facilitar el alimentar a bebés y a niños pequeños. Pero a los padres les genera confusión: ¿En qué momento pueden empezar a utilizarlas de forma segura?

Las tronas se deben empezar a utilizar cuando el bebé es capaz de mantenerse sentado de forma independiente y segura sobre una alfombra.

Si tu bebé necesita almohadas o cojines para mantenerse sentado en una alfombra, es pronto para utilizar la trona.

Si tu bebé se queda sentado de forma independiente sobre una alfombra, pero no puedes separarte de él porque en cualquier momento puede caer hacia los lados o hacia atrás, debes esperar un poco para utilizar la trona.

Si puedes poner a tu bebé sentado en una alfombra, sin que ningún objeto le ayude a mantenerse (cojines, almohadas, etc.), e irte a la cocina a buscar algo mientras él juega sentado de forma segura, puedes empezar a utilizar la trona para darle de comer.

Es importante por tanto que valoréis cuánta ayuda y supervisión necesita vuestro bebé para quedarse sentado de forma independiente sobre una alfombra.

Frecuentemente me comentáis que vuestro bebé se queda sentado solo en una hamaca o en el sofá. Cuando están sentados sobre una hamaca o sobre el respaldo del sofá, no están manteniendo el peso de su cabeza y su cuerpo, por lo que no podemos considerar que son capaces de quedarse sentados de forma independiente.

Las hamacas son dispositivos tentadores a usar de forma prolongada en bebés tranquilos, ya que dejan al adulto tiempo para otras tareas mientras el bebé está en un entorno seguro. Pero, es importante que sepáis que las hamacas no facilitan el desarrollo motor de vuestro bebé, ya que no entrenan el control del tronco ni la movilidad.

Además, el uso de hamacas facilita el desarrollo de deformidades craneales y tortícolis cervicales. Os dejo el enlace al post “¿Cómo evitar las tortícolis cervicales y las deformidades craneales en bebés?”.

Por este motivo, es importante que reduzcáis al máximo el tiempo de uso de este dispositivo y que siempre esté alternado con tiempos de estimulación sobre la alfombra, bocabajo, etc.

En el caso de que sí podáis utilizar la trona de forma segura, surge la duda de qué tipo de trona elegir y cómo utilizarla.

Actualmente existen muchos tipos de tronas en el mercado: fijas, plegables, evolutivas, convertibles, hinchables o elevadoras, acoplables a la mesa, etc.

Debido al uso que os aconsejo que le deis a las tronas (lo veremos a continuación), os recomiendo una trona sencilla, económica y de material rígido y fácil de limpiar. No os recomiendo una trona con asiento textil, ya que invita al bebé a echarse sobre ella y no favorece que su musculatura se active.

Uso de tronas
Trona Fija Ovo Original Luxe One

Las tronas fijas de PVC o Polipiel son sencillas, económicas y muy prácticas. Las tronas evolutivas de madera son una buena opción, pero su coste es mayor.

Las tronas plegables y las convertibles son una buena opción cuando se dispone de poco espacio, pero os recomiendo las de PVC (sin asiento de tela) o de madera.

Las tronas hinchables o elevadoras y las acoplables a la mesa no son, desde mi punto de vista, las más indicadas para el uso diario.

Respecto al uso de las tronas, os recomiendo limitar su uso a los momentos de la comida, pero son también útiles para estimular la manipulación de objetos pequeños (motricidad fina y pinza manual) y para trabajar la atención en bebés más grandes.

Sin embargo, al igual que las hamacas, su uso debe limitarse, ya que no permiten la movilidad del bebé. No os recomiendo utilizarlas durante largos periodos de tiempo, ya que debemos ofrecer al bebé un entorno que permita moverse de forma libre para darle oportunidades de aprendizaje.

Por último, me encantaría que, si os gusta el contenido del blog, me dejéis algún comentario para recibir feedback y me contéis sobre qué temas os gustaría leer. Gracias por estar por aquí una semana más y ¡Hasta pronto lectores!

Acerca del Autor

Ana Carrasco

Mi nombre es Ana Carrasco, natural de Sevilla. Soy graduada en Fisioterapia por la Universidad de Sevilla y Doctorada en Fisioterapia por la Universidad de Murcia. Después de años dedicados a la Fisioterapia Pediátrica, decido poner a tu disposición toda mi experiencia y mis conocimientos para ayudarte en el maravilloso pero inquietante camino de ser mamá o papá.

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